sábado, 17 de septiembre de 2011

Juventud


Esta blanca noche de verano se desvanece lentamente hacia la nada; se desvanece y ya no volverá a ser nunca. Apenas el recuerdo podrá derribar una puerta, esculpir un espejo de sombras sobre el que dibujar -equivocadamente- tu rostro y tus manos, el acantilado aquel donde nos hicimos mar, el preciso instante en que, jóvenes y nerviosos, nos supimos, pero no retornará con él el aroma cálido de tu piel, la quietud de tus huellas sobre mis huellas, el vértigo húmedo de tus labios sobre mi boca. Ya no quedará nada; el día de mañana se alimentará de las cenizas de hoy. Mudos quedarán los veranos venideros, como un soplo de frío estancado en mitad de mis sábanas. Intentaré esculpir tus ojos a golpe de recuerdos y fotografías, intentaré recuperarte desde esta lejana derrota de labios muertos, de versos muertos, de palabras y besos sin retorno.


Toni García Arias

2 comentarios:

  1. Hola, preciosas letras van desnudando la integral, la pura belleza de este blog, si te va la palabra elegida, la poesía, te invito al mio,será un placer,es,
    http://ligerodeequipaje1875.blogspot.com/
    gracias, buen día, besos numantinos...

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  2. Un triste adiós en tus bellas letras.
    feliz fin de semana.

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